El cuerpo quiere parar, pero la mente debe continuar
Muchas veces, quien malla es su mente. Ella debe estar en completa sincronía con su objetivo. ¡Nunca desista!

Entrenando como si hubiera sido elegido para los Juegos Voraces
¡Dé el máximo de sí cada día, pues al final usted será recompensado! Foco, fuerza y fe.

Un percance nunca debe ser suficiente para hacerte desistir de vez. ¡Levántate e inténtalo de nuevo!