Serotonina Baja - Síntomas, Tratamiento y Causas
La serotonina es una sustancia química producida por el cuerpo que permite que las células cerebrales y otras células del sistema nervioso puedan comunicarse unas con otras. La serotonina baja en el cerebro es una condición que puede generar cuadros de depresión. Cuando en exceso en el cerebro, sin embargo, puede conducir a una actividad excesiva de las células nerviosas, causando un conjunto de síntomas potencialmente fatales conocido como síndrome de serotonina.
Echa un vistazo a un poco sobre lo que causa la serotonina baja, así como sus síntomas, tratamientos y formas de prevención del problema.
¿Cómo funciona la serotonina?
La serotonina es un neurotransmisor monoamina sintetizado a partir del aminoácido triptófano. La mayoría de la serotonina producida en el cuerpo se encuentran en las células enterocromafines del tracto gastrointestinal. En el intestino, la serotonina es la principal responsable de regular el tránsito intestinal.
El exceso de serotonina secretado por las células es removido por las venas de drenaje del intestino. A continuación, se enlaza a las plaquetas en las que están almacenadas.
El resto de la serotonina presente en el organismo se sintetiza en las neuronas serotoninérgicas encontradas en el sistema nervioso central, donde actúa como un neurotransmisor con el resto de las células. En el sistema nervioso central, la serotonina contribuye a la regulación del sueño, el apetito y el humor, además de estar involucrado en la memoria y el aprendizaje.
Aunque la serotonina funciona como un neurotransmisor en el sistema nervioso central, también puede desempeñar un papel importante como vasoconstrictor en la sangre. También se utiliza para controlar la liberación del crecimiento similar a la insulina. Además, la serotonina ayuda a equilibrar las hormonas, así como la insulina.
Causas de la serotonina baja o alta
Los niveles de serotonina en el cuerpo pueden verse afectados por un número de factores incluyendo la dieta y el uso de medicamentos. Por ejemplo, dietas ricas en carbohidratos y pobres en proteínas aumentan la producción de serotonina a través de la insulina. De la misma forma, los alimentos que contienen una cantidad mucho mayor de triptófano que los aminoácidos como leucina y fenilalanina promueven la producción de serotonina.
Por lo tanto, mientras que la papaya y el plátano ayudan a mejorar la producción de serotonina, el trigo integral y el pan de centeno ayudan a reducirla en el organismo. Además, algunos medicamentos desencadenan directamente la liberación de serotonina, como el suplemento de aminoácidos triptófano, así como la levodopa, codeína y drogas como la cocaína.
Receptores de la serotonina
Antes de entender los efectos de la serotonina para la salud en el cuerpo, es importante entender sobre los receptores de serotonina, a los cuales la serotonina se une para desempeñar sus funciones. En total son 7 receptores de serotonina nombrados a partir de 5-HT 1 a 5-HT 7. Cada uno de estos receptores tiene un número de subtipos. Todos los receptores de serotonina son estructuralmente similares y tienen mecanismos de acción similares, con excepción del 5-HT3.
Mientras que los otros receptores de serotonina 6 son receptores acoplados a la proteína, 5-HT3 es un canal de iones de sodio / potasio. Así, mientras que el resto de los receptores de serotonina trabajan, reduciendo o aumentando los niveles de AMPc (adenosina cíclica trifosfato) dentro de las células, 5-HT3 funciona a través del control del transporte de iones de sodio y potasio a través de los canales iónicos.
Los receptores de serotonina también son necesarios para controlar los niveles y acciones de otros neurotransmisores, tales como adrenalina, noradrenalina, dopamina, acetilcolina, glutamato y GABA. Por lo tanto, estos receptores pueden producir respuestas que estimulan o inhiben el sistema nervioso central. Además de los neurotransmisores, los receptores de serotonina también controlan la liberación de hormonas como el cortisol, la prolactina, la oxitocina, la vasopresina y la sustancia P.
Importancia de la serotonina
La serotonina es un importante neurotransmisor en el cerebro. La interconexión de la mayoría de las células en el cerebro, directa o indirectamente y por ser capaz de interferir en los niveles de otros neurotransmisores, produce interacciones complejas en el cerebro.
La serotonina ejerce efectos importantes sobre las partes del cerebro responsables de controlar el humor, el apetito, el deseo y el rendimiento sexual, el sueño, la memoria, el aprendizaje, la interacción social y la regulación de la temperatura.
Sin embargo, fuera del cerebro, la serotonina también afecta el sistema cardiovascular, el sistema endocrino y los músculos. Las investigaciones recientes también demuestran que la serotonina también puede contribuir a la regulación de la producción de leche en la mama durante la lactancia.
La serotonina disminuye el apetito, bloqueando las acciones de la dopamina. La dopamina es responsable de aumentar el apetito, pero mientras se come, la producción de serotonina aumenta constantemente ligándose a los receptores 5-HT2C encontrados en las células que producen la dopamina. Por lo tanto, la serotonina apaga la producción de dopamina y, junto a él, reduce el apetito.
Hay casos en que la serotonina actúa directamente como un factor de crecimiento en el cuerpo. Por ejemplo, la producción tanto de 5-HT2A y 5-HT2B aumenta cuando el hígado está dañado. El aumento de la unión de serotonina en estos receptores hace que el crecimiento celular sea necesario para reparar el hígado.
La serotonina también tiene un efecto sobre el metabolismo óseo. En realidad, se sabe que ayuda a promover la pérdida de hueso (5-HT1B) como el aumento de la masa ósea (a 5-HT2B). En el sistema cardiovascular, la serotonina funciona como vasoconstrictor que ayuda a interrumpir la hemorragia. También actúa en el crecimiento promoviendo la regeneración de nuevos tejidos para la curación.
Relación entre las causas y los síntomas de la serotonina baja
Aunque los síntomas de serotonina baja pueden ser causados por otros factores, la principal causa todavía son los bajos niveles de serotonina en el cerebro. Además de los bajos niveles de serotonina, algunos de los otros factores que pueden desencadenar estos síntomas son la escasez de receptores de unión de la serotonina o incapacidad de las plaquetas para transportar la serotonina conectándolos a los receptores.
Los niveles bajos de serotonina pueden ser causados por algunos de estos casos:
- Ingestión inadecuada de L-triptófano de fuentes dietéticas.
El L-triptófano es el aminoácido utilizado en la producción de serotonina. Es capaz de atravesar la barrera sangre-cerebro. Cuando los alimentos ricos en L-triptófano se retiran de la dieta, la serotonina reduce su producción y cuando se reintroducen, la serotonina se sintetiza de nuevo.
Los alimentos ricos en L-triptófano incluyen carnes, aves, algunas frutas de cáscara gruesa como piña y productos lácteos. La ingesta de estos alimentos puede revertir el problema fácilmente.
- Deficiencia de vitamina B6
La vitamina B6 o piridoxal 5-fosfato es una coenzima esencial en la síntesis de serotonina a partir del L-triptófano. Por lo tanto, también es necesaria para una adecuada producción de serotonina. Las personas que sufren de deficiencia de vitamina B6 a menudo tienen bajos niveles de serotonina también. Ingerir alimentos ricos en vitamina B6 puede ayudar a reparar este problema.
- Competición de aminoácidos
Las proteínas deben ser ingeridas para aumentar la producción de serotonina. Sin embargo, las dietas ricas en proteínas generalmente conducen a la serotonina baja principalmente debido al número de aminoácidos que compiten con la absorción de la sustancia. Por lo tanto, el consejo habitual es adoptar baja proteína y dietas ricas en carbohidratos.
Los alimentos ricos en proteínas llenan el cuerpo con aminoácidos que compiten para atravesar la barrera sangre-cerebro. Esto significa que la cantidad de paso de triptófano en el cerebro se reduce y, por lo tanto, la producción de serotonina también se reduce.
Los aminoácidos que compiten con el triptófano son, principalmente, aquellos que son estructuralmente aminoácidos de cadena ramificada similares, tales como valina, leucina e isoleucina.
Por otro lado, los alimentos ricos en carbohidratos aumentan los niveles de insulina que llevan a la absorción de la mayoría de estos aminoácidos (excepto triptófano) en las células del cerebro especialmente a las células musculares. Por lo tanto, la concentración de triptófano en la sangre es lo suficientemente elevada para una cantidad significativa de atravesar hacia el cerebro.
Aminoácidos no esenciales como la teanina, que se encuentran principalmente en las hojas del té verde, también pueden ayudar a reducir directamente los niveles de serotonina en el cerebro.
La teanina puede atravesar la barrera hemato-encefálica y competir contra el triptófano. No sólo reduce la cantidad de triptófano que se utilizará para la síntesis de la serotonina, pero también degrada la serotonina y bloquea su liberación a partir de las terminaciones nerviosas.
Síntomas de la serotonina baja
Como la serotonina tiene un efecto profundo sobre el sistema nervioso central y también en los sistemas cardiovasculares y musculoesqueléticos, la serotonina baja puede causar algunos efectos muy graves. Los síntomas se pueden clasificar en dos categorías: físicos y emocionales.
Los físicos pueden ser:
- La fatiga persistente, esto ocurre aunque el paciente esté completamente descansado y esté inactivo la mayor parte del tiempo;
- Los trastornos del sueño, aunque pueden durmerse rápidamente, el paciente con serotonina baja tiene problemas para dormir tranquilamente debido a la ansiedad y el síndrome de las piernas inquietas;
- La pérdida de apetito y el deseo de los carbohidratos, el paciente puede perder el interés en comer, pero también desear carbohidratos compulsivamente, ya que el cuerpo intenta reiniciar la producción de serotonina, causando picos de producción de insulina, lo que puede llevar a la ganancia de peso ;
- Las oscilaciones de la temperatura corporal, esta condición es causada por la interacción de neurotransmisores que intentan compensar la serotonina en receptores de serotonina especialmente en el hipotálamo;
- Migraña y dolores de cabeza;
- Dolor gastrointestinal, que es causado por el movimiento gastrointestinal reducido causado por la baja secreción de serotonina por las células enterocromafines en el intestino.
Los emocionales pueden ser:
- Dormir emocional y retracción social, o sea, se puede perder el interés en compromisos sociales y deseo por experimentar nuevas vivencias;
- Depresión, signo clásico de serotonina baja, en este caso, las drogas como antidepresivos se utilizan para aumentar los niveles de serotonina en el organismo;
- Aumento de la sensibilidad emocional, esto puede presentarse como baja autoconfianza, autoestima, intolerancia y facilidad en ofender, lo que puede llevar a crisis de llanto súbitas y crisis de tristeza;
- Pérdida de interés en actividades sexuales e irritabilidad y trastorno obsesivo compulsivo.
Tratamiento de la baja serotonina
Hay diferentes maneras de aumentar los niveles de serotonina. Algunos de ellos se describen a continuación:
- Ejercicio y Meditación
Diferentes estudios han revelado que el ejercicio moderado es suficiente para mejorar el estado de ánimo y aumentar los niveles de serotonina naturalmente en el cerebro. De la misma forma, todas las formas de meditación pueden ayudar a superar la ansiedad y cualquier dificultad emocional que cause la depresión.
- Tomar sol
La luz solar natural ayuda a reducir los niveles de melatonina, que compite con la serotonina. La liberación de serotonina en ciertas partes del cerebro y de algunos receptores de la serotonina sigue ritmos diurnos. Por lo tanto, la producción de serotonina está en su pico más alto en la mañana y se estimula cuando se expone a la luz natural.
- Comer alimentos ricos en carbohidratos y proteínas ricas en triptófano
Ingerir una dieta rica en carbohidratos ayuda a aumentar los niveles de insulina que llevan a la síntesis de serotonina, llevando más triptófano al cerebro. Sin embargo, mucho carbohidrato puede causar una ganancia de peso rápido. Para evitar esto, los carbohidratos con bajos índices glucémicos se recomiendan para aumentar la serotonina baja, como la cebada, la avena y el trigo sarraceno.
Además, las proteínas que sirven como fuente de alimento de triptófano también se recomiendan para ayudar a aumentar los niveles de serotonina. Tales proteínas incluyen aves, carnes, alimentos lácteos, soja y legumbres.
- Tomar suplementos para serotonina
Los suplementos también se pueden ingerir como una forma de ayudar a mejorar los niveles de serotonina baja. El más importante de estos son los suplementos de triptófano. Un suplemento de triptófano puede ayudar a aumentar los niveles de serotonina por aumentar la concentración de plasma de triptófano, que a continuación, aumenta la cantidad de aminoácidos que se lleva al cerebro.
Sin embargo, cualquier suplemento sólo debe ser ingerido con orientación médica, pues el uso discriminado puede interferir en su salud y generar efectos colaterales.
Las hierbas que aumentan la producción de serotonina también son eficaces. Sin embargo, se debe tener cuidado de no ingerir estos suplementos con fármacos serotoninérgicos, ya que esta combinación puede causar una reacción de toxicidad conocida como síndrome de serotonina (cuando se produce un alza en los niveles de serotonina más allá de lo normal).
- Tomar medicamentos para serotonina
Los medicamentos que aumentan los niveles de serotonina en el cerebro también se pueden utilizar para tratar los síntomas de serotonina baja. Las principales clases de medicamentos utilizados son ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina) y SNRI (inhibidores de la recaptación de serotonina norepinefrina), que también son antidepresivos. Estos medicamentos permiten actuar directamente en las terminaciones nerviosas, impidiendo su reabsorción. También deben utilizarse con prescripción médica.
prevención
La mejor forma de prevenir la serotonina baja es ingerir alimentos que ayudan en la concentración de serotonina en el cuerpo, son ellos: chocolate amargo, vino tinto, carnes magras como peces con omega 3, piña y otras frutas de cáscara gruesa, leche y derivados, cereales integrales.
La práctica de actividades físicas constantes también ayuda a estimular la serotonina en el cuerpo, aliviando los estados de tensión y mejorando la calidad del sueño. La liberación de la endorfina, la hormona del placer, durante las actividades deportivas y físicas, también ayuda a evitar la serotonina baja.
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